(Poema dedicado a mi abuela, Mercedes).
Bonita noche,
noche de estrellas,
sentada en el prado,
contemplo la hierba.
Hierba que,
sin lluvias y con soles,
ha quedado seca,
sin apenas flores.
Qué bella es Castilla,
bermeja y con sequía,
con sudor de ganaderos
y llanuras amarillas.
Quien viera a Merce y Chuso
paseando por los campos,
radiantes de felicidad
y agarrados de la mano,
paseando muy despacio,
como dos enamorados,
deteniendo el tiempo,
contemplando estos campos.
SARA
Archivo del blog
-
▼
2012
(12)
- ► septiembre (1)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Muy bonito Sara; tu abuela Mercedes se siente muy, pero que muy orgullosa de ti, más o menos como nos sentimos todos los tenemos el privilegio de ser tu famia.
ResponderEliminarMuchos besos preciosa.
Precioso, me encanta, ¡eso es! =)
ResponderEliminarHay que expresar el máximo sentimiento en cada verso, y en este poema se consigue, ¡muy bien!
Muy bonito, sigue así Sarita =)